El punto de cruce
¿Qué bien me puede traer buscar el sentido de mi existencia afuera? ¿Qué tanto hay que hacer, que producto crear, para que a través de éste me sienta realizada? Buscar afuera el sentido de lo que es de adentro... no lo entiendo. Pero no puedo negar que la vida por sí misma a veces no me es suficiente. ¿Por qué?
Finalmente el alma pide nacer de nuevo en un mundo del mismo orden que sí misma —una segunda llegada a la inocencia, no através de un cristal oscuro, sino cara a cara, conscientemente...
En nuestro camino pasamos a través de crueles pruebas. Exilio, frialdad, desesperación. Muerte.
Si sufrimos lealmente la experiencia, podemos cruzar al otro lado del punto de intersección y descubrir que nuestra fidelidad ha aportado al mundo una nueva calidad.
Comentarios
Publicar un comentario